Dr. Larosi Haidar Atik, Profesor Titular de la Universidad de Granada, del Departamento de Traducción e Interpretación. Licenciado y Doctor en Traducción e Interpretación (Universidad de Granada). Ha participado en varias antologías poéticas como son Mil y un poemas saharauis (2013) y Poetas saharauis. Generación de Amistad (2013) y en una antología de textos cortos titulada Don Quijote, el azri de la badia saharaui (2009). Ha publicado diferentes trabajos sobre traducción y cultura saharaui, entre los que podemos destacar Cuentos saharauis (2007), fruto de su tesis doctoral; la edición y coautoría de Tres amores árabes: aproximación al amor en Al-Ándalus, Marruecos y el Sáhara Occidental (2013); la coedición de Río de Oro (2018) y de Saharauidades (2020).
Profesor honorario de la Universidad Autónoma de Madrid y miembro de la Generación de la Amistad Saharaui, entre sus obras más representativas se encuentran textos como Versos refugiados (2007), Literatura del Sahara Occidental. Breve estudio (2008), El porvenir del español en el Sahara Occidental (2009), La maestra que me enseñó en una tabla de madera (2011), El sueño de volver (2012), Cuentos saharauis de mi abuelo (2015), Tiris, rutas literarias (2016) y La entidad política precolonial saharaui (en el ideario de la República Saharaui) (2018).
El presente artículo nos muestra en detalle el modelo educativo saharaui, construido en los campamentos de refugiados instalados en Tindouf (Argelia) desde 1976, año en el cual se proclamó la República Árabe Saharaui Democrática (RASD). Dicho modelo se encuentra profundamente inspirado en las lecciones aprendidas de la experiencia de colonialismo, guerra, genocidio, ocupación, exilio y refugio padecido por su pueblo, analizada a la luz del pensamiento crítico de autores como Franz Fanon o Paulo Freire. La construcción cotidiana de su historia, la problematización de su realidad presente y su lucha liberadora, junto con el propio contexto de descolonización, todavía pendiente en este territorio africano, se han convertido desde aquellos años, al mismo tiempo, en un auténtico eje estructural de identidad, una reivindicación histórica, una carta de presentación al mundo y en la marca distintiva de la “pedagogía refugiada saharaui”.